28 de octubre de 2009

Si Muero Antes Que Tú…Capítulo II



Hola chicas, acá les dejo el segundo capítulo de Si Muero Antes Que Tú...Se está poniendo lindo, espero que les guste...y va dedicado para Kokoro que es el cumpleaños...y es a la que la agradezco porque leyendo sus historias, comencé a animarme a escribir...y gracias a eso, me siento más viva...
Feliz cumple para ella...y feliz vida para todas...

Bechosss...

PD: Déjenme los comments, y también cosas que vayan descubriendo, o cosas que no les gusten también...y si alguna quiere ayudarme a personalizar mi blog, bienvenida sea...

Capítulo II---La Presentación


De repente, la oscuridad…todo se ensombrecía…sólo oscuridad…y puros ruidos…

¿Qué estaba ocurriendo?...¿De qué me estaba escondiendo?...¿Por qué me escapaba?...Aunque sentía que alguien tiraba de mí, alguien quería que me quedara, que dejara de luchar para correr más y más rápido. ¿Pero qué era lo que estaba pasándome?...

Y de pronto, la luz nuevamente. Veía algo dificultoso, si es que se podría asegurar que veía. Y lo peor aún era lo que escuchaba. Voces, bullicio, palabras sin sentido, y todos alrededor mío. Pero aún, al recobrar la conciencia me di cuenta de que yacía en el inmundo suelo de ese asqueroso bar. ¿Por qué?. La verdad, ni yo lo sabía. Sólo podía divisar un brillo. Unas pequeñas manchas verdes, dulces, por cierto.

Y en ese momento recordé…

Me tendría que haber quedado en casa, con el Pop Corn, la gaseosa Diet y mi gata…sí…ah y mi batón preferido. Para qué haber salido?, si me podía quedar tranquilamente panza para arriba mirando la TV. Pero Bella Swan tenía que hacer, una vez más, su mejor papelón de la semana.

A quién le podría ocurrir, que al tener la remota posibilidad de que el mejor hombre, el mejor ser humano, el más perfecto, se acercara a tu mesa, se dignara a volver a mirarte (con lo que parecía que sufría cuando lo hacía), quisiera entablar una conversación contigo, aún si sólo fuera hablar del diseño del mantel de la mesa, o del color de las paredes, de cómo salió el último partido de los Yankees, o de mi opinión sobre la economía mundial…A quién le podría ocurrir, olvidarse de respirar al ver a ese precioso hombre queriendo acercarse…

Pero sí, a Bella todo le sucede… Y al fin, sucedió…Así fue que terminé en el piso. Sí, se pensará que Bella es dramática y que no puede ponerse así sólo porque ese hombre la mirara…Pero si pudiera graficar la escena aún mejor, seguramente se entendería mi situación…

Asique, allí estaba, tirada en el suelo, temblando obviamente, y queriendo desaparecer en ese preciso instante. El hombre de los ojos verdes me miraba con una mezcla de furia y ternura…que cara debería tener yo, si le causaba tal impresión!...Pero ya me ocuparía de eso más adelante, cuando lograra escabullirme de allí y llegar al espejo más cercano.

En ese momento, llegaron mis amigas. Al fin 2 caras conocidas!!!...Ellas eran las culpables de todo esto…sabían en qué situación me encontraba, sabían que no debía salir, que aún era muy pronto, que cualquier cosa extraña, fuera de lo común, repercutiría en mí de esa forma…Pero allí estaban, cubriéndose la boca, a punto de gritar, AHORA preocupadas por su amiga, que entre paréntesis, se hallaba aún tirada en ese sucio piso y con un bombón observándola.

Al fin, me ayudaron a levantarme, y sin querer, el hombre de los ojos verdes (que nadie me había presentado aún) quedó a un lado de la escena…Por un momento sentí, que quería que él la protagonizara…Dios! Por qué me ponía a pensar en eso ahora?…Es un simple chico, como si nunca hubiera visto a un hombre…

Al levantarme, sentí aguijones en mi cabeza. Sentía todo moverse, realmente estaba mareada, como si los 2 tequilas que me había tomado, hubieran hecho el efecto de 15. Las chicas me ayudaron a mantenerme en pie. Me senté en la mesa más cercana. Miré a mi alrededor, y encontré que muchas parejas aún me miraban con cara expectante, como si esperaran que les agradeciera la preocupación. Trágame tierra!

Cuando ya todo estaba más calmo, Emmet y Jasper decidieron que ya había finalizado la noche, y decidieron devolvernos a cada una a su hogar.

De las presentaciones, ni hablar. Una noche para el olvido…En sí, sólo había tomado 2 pobres tragos, había escuchado una sola (bellísima) canción del hombre de los ojos verdes y su grupo, había logrado mantener unos segundos el contacto visual con él, pero al bajar del escenario, estar un rato sin mirarme, y de repente acercarse a mí de manera tan sigilosa, volver a contactarse visualmente, y preguntarme tanto, sin siquiera despegar sus labios…había hecho que me desequilibrara…había logrado influir tanto en mi, como nadie lo había conseguido en los últimos tiempos…Algo que no se lo permitía a nadie últimamente…y al menor atisbo de voz, perder la conciencia en sus brazos…

Una excelente primera impresión, no?...

…la desequilibrada del bar a la que se le olvida respirar…

Esta noche, en fin, no había tenido mucho de especial…o eso al menos era lo que creía en ese momento.

Al salir del bar, el aire fresco en mi cara, me hizo sentir plena…Me volvió el alma al cuerpo, era lo que estaba necesitando, sin dudas. Alice me sujetaba de un lado, y Rose del otro…Verdaderamente, estaban preocupadas mis amigas, y por eso las adoraba con todo mi ser…Porque aún, cuando se mandaban líos, estaban allí para remendarlos…y por eso daría la vida por ellas, como ya la había dado por otros…

De repente, escuché un golpe. Me giré, y encontré que el hombre de los ojos verdes había salido del bar, siguiéndonos y se dirigía hacia nuestro grupo. Comenzaron a sudar cada una de las superficies de mi piel, y a temblar mis piernas…

Por qué este sujeto tenía tanto efecto fisiológico en mi cuerpo?...De alguna manera, podía controlarlo?...

Esto no lo podía tolerar…Había logrado hacerme invulnerable a las peores situaciones, y sin embargo, un simple niño podía acabar con todo lo que había logrado, por una simple miradita?...Bueno, no tan simple niño, ni tan simple miradita, pero en fin…

Y aquí estábamos…al fin juntos, y de pie ambos: el hombre de los ojos verdes y la desequilibrada niña del bar a la que se le olvida respirar…En ese momento, mágicamente, Alice intenta desaparecer, queriéndose llevar a Rose, pero ella seguía firme a mi brazo. No dejaba de mirarlo inquistivamente, como si no pudiera descubrir lo que él ocultaba…Y de pronto, Jasper decide aparecer y cumplir con lo que debería haber hecho hacía ya 2 horas

…Presentarnos…

Emmet se acercó también y ayudó a quitarme a Rose de encima, mientras que Alice rompía el silencio, y se acercaba a abrazar efusivamente a aquél hombre. De hecho, me pareció una escena totalmente ridícula…que mi amiga se tirara prácticamente encima de ese sujeto, y peor que éste le devolviera el abrazo, aunque un poco sorprendido también, como si se conocieran de toda la vida. Jasper no parecía sorprendido, lo que causó en mi una terrible ira…Sería que todavía no conocía a mi amiga y no me daba cuenta que era propio de ella confiar en la gente y ser así de demostrativa…

Yo creo que a veces, era sólo envidia…por no ser como ella, por no poder olvidar, y por tenerle rencor a los hombres…aún siendo tan bellos como él…En fin, no era el extremo como Rose de desconfiada, pero tampoco invadía a la gente como Alice. A propósito, Rose seguía agarrada de mi brazo estupefacta por la reacción exagerada de Alice.

-Bueno, era hora de que los pudiera presentar…Este es Edward, Edward Cullen, mi amigo de la infancia, que hoy cantó para nosotros- comenzó Jasper, y siguió Alice: -Jasper me ha hablado mucho de ti, es más habló de tus dotes artísticas, pero yo no le creía…de veras, que me ha cerrado el pico-. Este sujeto de ojos verdes, al que llamaré Edward a partir de ahora, se sonreía y me miraba de reojo…aún no entendía por qué, pero ya lo descubriría…

-Gracias, y tú debes de ser Alice, no?...a mí también me han hablado mucho de ti…Como también de lo bellas que eran las mujeres aquí en Forks…y confieso que tampoco le creí a mi amigo - Edward me miraba y proseguía- pero ahora que las veo, yo también afirmo que me han tapado la boca- decía mientras se sonreía de una manera torcida muy suya, que seguramente era una mueca muy propia de Londres…pues, aquí no se veía casi nunca…

A todo esto, yo sentía que mis piernas me volverían a fallar, por lo tanto empecé a moverlas sutilmente, aunque obviamente, nadie dejó de percatarse de mi movimiento. Rose encaró: -Jaja, muy lindos tus piropos, pero la verdad que estamos un poco apurados, se nos hace tarde, y Bella no se siente tan bien como para estar helándose aquí afuera, miren nomás cómo está temblando- Bingo! Rose acababa de deschabarme…

Para lo cual Edward, con cara de preocupado me miró y dijo: - Rose, la chica del carácter más bravo de la escuela…sí, no pongas esa cara, creo que debo recordarte que puedo ser más irónico que tú-. Yo no creía lo que estaba oyendo, no podían estar peleándose justo en este momento, y que carácter que tenía este tal Edward…cómo le podía hablar así a Rose?…está bien que ella lo estaba mirando muy mal, y lo estaba dejando mal parado, pero igual…Evidentemente, el trato que ellos tenían en la infancia no debería haber sido tan grato…Aunque yo sabía que los Hale adoraban a este sujeto…Serían celos de Rose hacia su hermano Jasper, por estar tan pendiente de Edward?...

-Y además, opino lo mismo que tú, Rose, yo tampoco deseo que ¿Bella?- me miró mientras pronunciaba mi nombre, con lo cual asentí, sólo de oír cómo sonaba mi nombre en su melodiosa voz- acabe enferma a causa de mi culpa o de cualquier otro tras tiempo…Por lo tanto, los invito a llevarlos en mi coche- Edward hablaba, mientras Jasper y Emmet asentían encantados…Alice no paraba de sonreír también…Sólo Rose y yo parecíamos las aguafiestas de esa noche…

Pero bueno, no era muy apropiado llegar a mi casa medio borracha, a punto de desmayarme por segunda vez, con un auto que no era el mío, y con un hombre que rajaba la tierra conduciéndolo…Pero, si todos mis amigos iban, no tendría opción.

-Yo voy caminando, gracias…Vamos, Emmet?- Rose me salvó de pensar qué debería elegir. Emmet, con cara de disculpa, se acercó a Edward, lo saludó como se saludan estúpidamente los hombres como si existiera algún tipo de código entre ellos, y se dispuso a caminar con mi amiga. –Rose, no te vayas, ven conmigo, o espérame que voy con ustedes…- le dije a Rose, pero ella ya se había marchado, y no quiso escucharme…

En ese momento, me doy la vuelta para mirar a Alice, y me encuentro con esos ojos verdes, nuevamente mirándome de esa forma tan extraña…Traté de evitarlos, ya que no quería nuevamente otro episodio bochornoso. Sin que me diera cuenta, entre tanto debate interno, Edward como si pudiera leer mi mente, se acercó sutilmente, se quitó su chaqueta y me la sostuvo por encima de mis hombros, sin desaprovechar el escaso espacio que estaba quedando entre nuestros cuerpos. Yo bajé la vista, porque como dije antes, estos acercamientos me ponían muy nerviosa, y no quería que algún brote de torpeza dejara otra vez al descubierto mi desastrosa personalidad. Pero Edward me miraba como si nada de eso le importara…

Qué bien lo estaba haciendo…Si lo que en verdad quería era conquistarme, lo estaba logrando cada vez más…Pero yo no lo debía hacer tan fácil… o eso era lo que mi mente estaba repitiendo una y otra vez, hasta que mi memoria lo apuntara…

Y como si ya nada fuera demasiado, tomo mi mano temblorosa, y dejó un beso en ella. Típica escena de un clásico del cine de 1920…De dónde había salido este espécimen?...De pronto, sentí como si me fuera a estallar la cara…

Edward se percató de esto y me dijo: -Bella, aunque sonrojarte hace que tu belleza se realce aún más, no tienes por qué hacerlo…- yo sólo pude sonreírme en respuesta a tan hermoso piropo, y me apresuré a acercarme donde estaban mis amigos…

Edward se acercaba por detrás, y yo sentía su mirada en mi nuca, como si de esa manera pudiera hacerme sentir el calor que lo inundaba. De más está decir, el hermoso Volvo que manejaba…era un sueño, y más aún comparado con el que tenía estacionado en la puerta de mi casa. Era de esos autos en los que tenías de todo, y en los que creías que estando allí estabas más cerca de la perfección…

Lo mismo que yo sentía al estar cerca de Edward…

Aunque traté de viajar en la parte de atrás con mi amiga, ella consiguió convencerme de ir delante, sólo con cerrarme la puerta sutilmente luego de haber entrado ella y su novio, y sacarme la lengua a través de la ventanilla, obviamente. A lo cual, Edward se sonrió ampliamente y me susurró:

-Que increíble amiga tienes…- y aquí se viene lo peor- No tengas miedo, no pensaba morderte…Sube, tranquila.

Que desafío me esperaba…

Tratar de no hacer tan evidente las ganas que tenía de que sí deseara morderme…



22 de octubre de 2009

Si Muero Antes Que Tú…Capítulo I

Hola otra vez a mis seguidoras!!!…(jaja, aunque sean muy poquitas)…como ayer andaba triste, me puse a escribir y salió el 1º Capítulo de Si Muero Antes Que Tú…más allá de que sea un fanfiction de Crepúsculo, creo que va a ser una historia de amor dramática, típico de la vida real…Espero que les guste!…Comenten!!!…





Capítulo I---Noche Especial


Definitivamente, no tenía que salir esa noche de casa. ¿Por qué había dejado que las chicas me convencieran de ir a ese bar súper top que inauguraban unos amigos de Rose? ¿Para qué? Si yo estaba contenta con mi plan del viernes por la noche que consistía en: Pop Corn y ¿gaseosa diet? Bueno, sí está bien, mi menú no era muy apetitoso pero en fin, tenía razón, no debía salir de casa esa noche. Mi pelo y mi ropa coincidían conmigo, no había forma de estar presentable. Ya se estaba haciendo tarde y yo todavía estaba quejándome delante del espejo. Esto era culpa de mi madre…vivió haciéndome pensar en qué debía ponerme y qué no, cómo vestir, y cómo no…y bueno, eso hacía que cada vez que confiara en mi propio gusto, me decepcionara…no servía para esto. Pero en fin, unos vaqueros y una camisita negra con unas botas altas negras también, salvaban a cualquier chica en apuros como yo. Y así me consideraba yo esta noche: una chica en apuros.


Por Dios, maldigo el día en que le dije que sí a Rose…Bueno, pobre, ella hacía todo lo que podía para que yo saliera un poco…Después del episodio de mi madre, no quise salir en mucho tiempo… También estaba Alice, que era mi ángel personal…era de esas niñas en las que se podía confiar ciegamente, que nunca se podía llegar a tener miedo de qué podría opinar…era hablar con una misma…Eso era Alice, aparte de extravagante, cariñosa, alegre y divertida…todas cualidades que la definían maravillosamente. ¿Y qué decir de Rose?...mi amiga de toda la vida…Ah! Ella siempre quería lo mejor para mí, era mi confidente eterna…era de esas amigas que una elige para que la acompañen toda la vida…hermanas de la vida…sí, eso eran mis amigas…Hermanas.


Pero eso no justificaba lo que iba a hacer esa noche…¿Por qué tener que luchar contra mi alma que se quería quedar sentada tranquila en el sofá, comiendo Pop Corn y tomando Coca diet?...Bueno, todo fuera por la felicidad de mis amigas…


Y allí estábamos, una más bella que la otra. Rose se había puesto un vestido corto rojo que le resaltaba la hermosa figura que tenía, y obviamente lo acompañaba con unos zapatos negros de taco alto que rajaban la tierra. Alice por su parte, iba más casual con una pollera tableada de color lila con una camisa blanca súper escotada, y unas chatitas blancas. Todas habíamos coincidido con el accesorio para el pelo, sólo que cada una con su estilo. Yo tenía mi pelo color chocolate con sus naturales reflejos rojizos, recogido en una larga cola de caballo. Alice en cambio, llevaba dos colitas que recogían su corto cabello negro, y Rose tenía su pelo rubio lacio con una media colita tirante que hacía resaltar su cara angular.


Entrábamos las tres en el bar, cuando una humareda nos abrazó de tal manera que mis pulmones y mi garganta se quejaron sonoramente. Entre tanto humo y bullicio, vemos como Rosalie se dirige hacia la barra donde se encontraban sus amigos: Emmet y Jasper. Estos chicos eran los dueños del bar que hoy abría sus puertas para todos los vecinos de Forks, que tan aburridos estaban por las noches. Rosalie había conocido a los chicos en la preparatoria, que ellos ya la habían finalizado hacía ya unos dos años.


A nosotras todavía nos quedaba lo peor…el último año y…la graduación. Típico momento que todas las chicas están esperando que llegue porque quieren ir a comprarse sus vestidos y lucirse delante de los chicos que les gustan. Pero la verdad, a mi me importaba muy poco todo esto de la “fiesta” del fin de curso…Sólo quería aprobar mis materias y poder irme lejos del húmedo clima de Forks, ¿y por qué no lejos de mi padre?…Con él definitivamente, no nos llevábamos bien, simplemente por el hecho de que no nos conocíamos…él nunca había querido conocerme, y pues ahora era yo la que no quería.


Mientras tanto, Alice y yo tratábamos de alejarnos de la puerta del bar y acercarnos a la barra. Había jóvenes por doquier que se abrazaban y se confesaban su amor, y no sólo se lo confesaban entre ellos, si no que también a las 100 personas que nos encontrábamos en ese recinto. Ya era común en mí preguntarme lo mismo, ¿había necesidad de demostrar tanta pasión delante de desconocidos que no teníamos quizás las mismas oportunidades? . Hace tanto que no tenía un acercamiento con un sujeto del sexo opuesto, que el último que recordaba era cuando me choqué con el niño que atendía la confitería del Instituto, mientras me tiraba un yogurt arriba de mi camisa nueva, hacía unos meses atrás. Y bueno, ya había dicho que hace mucho que no salía.


Entonces, luego de unos 10 minutos, logramos llegar con mi amiga a la barra, a juntarnos con los nuestros. Entre chiste y chiste, Emmet y Jasper nos comentaron que esa noche por ser la inauguración, tocaría una banda de unos amigos de ellos. Estos amigos eran londinenses, y habían viajado a Norteamérica para intentar insertarse en el mercado. Lo que yo pensaba era, después de haberse cruzado todo el Atlántico, ¿por qué habrían elegido Forks para publicitarse teniendo tantas ciudades comerciales alrededor? Pero bueno, eso parecía que era todo un misterio, ya que los chicos no lo podían explicar.


Mientras charlábamos y pedíamos unos tragos, observamos que del rincón menos iluminado del pub, emergía una figura alta e imponente que de a poco se iba iluminando. Al principio quedé impactada por la seguridad que emanaba esa figura…y con el paso de los segundos, me maravillaba aún más. El rayo de luz que se iba acercando a su figura, emanaba destellos a todo su contorno…Recién en ese momento me di cuenta que se encontraba sobre una tarima con unas tres jóvenes detrás que se encontraban interpretando una hermosa melodía, con sus respectivos instrumentos. Se escuchaban unas notas improvisadas que provenían de un instrumento de viento, seguramente, si es que mi poca cultura de música no me engañaba.


De repente, cuando se iluminó por completo su figura, comprendí de dónde venían estas notas. Él tocaba el saxo, y por cierto lo hacía de maravillas. Dulce, serenamente, iba tocando esas melodías introductorias que ya hacían que lo demás perdiera sentido para mí. En cuanto a él, ¿qué podría decir? ¿Que era el hombre más hermoso que había visto jamás? No sólo por sus intimidantes dimensiones, sino también por su escultural contorno, y su delicado rostro. Su pelo broncíneo y tan desprolijamente peinado, sus ojos verdes y profundos, su boca delicada. Y cuando pensé que nada más podía sorprenderme…su voz, su gloriosa voz hizo que todo se volviera liviano alrededor mío…sentí que flotaba, que me desprendía de todo lo que me ataba a ese sucio bar y sólo podía escuchar su melodiosa voz…


Pero como todo en mi vida, ese elixir no podía durar tanto…Alice me devolvió a la realidad, avisándome que iba al tocador y quería que la acompañara, a lo que yo me negué rotundamente, excusando que me dolían mucho los pies como para subir todas esas escaleras que nos separaban del mismo. Ella hizo puchero, pero al segundo se sonrió, y se fue rumbo a su tan ansiado tocador.


Cuando logré desligarme de mi amiga y volver a mi anterior y tan ansiada tarea, volví a posar mi mirada en esos ojos verdes, y de repente…contacto visual. Tan profundo fue, que me dolió. Rápidamente noté que se me iba coloreando el rostro…y cómo no si sus ojos inspeccionaban de tal manera los míos a pesar de la distancia que nos separaba y de la humareda propia del pub. Me miraban como si les debiera algo, como si necesitaran una respuesta, como si fueran los ojos del último ser que quedara vivo en este mundo aparte de él. Y eso es lo que sentí yo, que era el único ser. El único ser que gobernaba mi vida, que era capaz de planificar mis días y cuidar mis noches, resaltar mis virtudes y opacar mis defectos, hacer renacer mis sentimientos más escondidos y dejar fluir los más superficiales. Sus ojos ejercían un efecto embriagador sobre mi cuerpo, me sentí inmanejable.


Y pensar que yo quería quedarme en casa con el Pop Corn y la gaseosa diet, la película y mi gata… ¡y tan desarreglada que estaba! Podría haberme puesto ese vestido negro que me había regalado Rose en mi cumpleaños pasado…


Como si me hubiese leído la mente, se sonrió con una rara sonrisa torcida que parecía muy suya, y finalizó el extenuante contacto visual, para meterse de lleno en su melodía saxofónica. En ese momento, me invadió una angustia llena de remordimiento, y tristeza…me invadió el pasado, toda la tristeza que había dejado atrás, toda la nostalgia que habría querido esconder eternamente… ¿Por qué?, ¿por qué me estaba pasando todo esto? ¿Por qué por primera vez no podía manejar mis sentimientos?... ¿Por qué de repente me había vuelto tan vulnerable ante la mirada de un extraño?, un extraño que me hacía sentir tan plena como si lo conociera de toda la vida, como si fuera el hombre que el destino había elegido para mí.


Entre tanta discusión interna con mi mente, terminó la canción y fueron encendiéndose algunas luces, mientras resonaban los aplausos y los grititos de las chicas.


No me volvió a mirar por un largo rato, ni una sola vez más…

robert-cantando

18 de octubre de 2009

Si Muero Antes Que Tú...

Hola!!! gracias a los que me leyeron y me comentaron al dia siguiente: abuela!!! jaja..y a mama y a maru que me mandaron mail...la verdad que me gusta esto de expresarme de esta forma, me sirve para descargarme, y quien dice que quizas pasa como dice el tio leo y el dia de mañana me publiquen mis historias, jeje...

Bueno, quería contarles que quizás arranque otra historia paralela, en donde pueda inventar muchas cosas y no me limite a mi propia historia de vida...y de paso cumplo con algo que ya había prometido hacer...ya tengo algo escrito muyyy lindo, como para que sea el primer capitulo...pero bueno, que opinan??...

Les dejo un adelanto...si les gusta, vamos pa adelante e intento seguir ambas historias...

Besos y gracias por colaborar con mi nueva pasion...

Las adoro!!!

Si muero antes que tú, hazme un favor


Llora Cuanto Quieras Pero No Te Enojes Con Dios Por Haberme Llevado.
Si No Quieres Llorar No Llores, Si No Logras Llorar No Te Preocupes
Si Quieres Reír, Ríe.
Si Algunos Amigos Te Cuentan Algo De Mi, Óyelos Y Cree Lo Que Te Digan.
Si Me Elogian Demasiado Corrige La Exageración.
Si Me Critican Demasiado, Defiéndeme.
Si Quieren Hacerme Un Santo Solo Por Que Me Morí,
Di Que Yo Tenía Algo De Santo, Pero Que Estaba Lejos De Ser El Santo Que Dicen.
Si Quieren Hacerme Un Terrible Perverso,
Muestra Que Tal Vez Yo Tuve Algo De Malo Pero Que Toda La Vida Procure Ser Bueno Y Sobre Todo Que Toda La Vida Trate De Ser Mejor.
Si Sientes Tristeza Y Deseas Rezar Por Mi, Puedes Hacerlo
Pues Tal Vez Necesite De Tu Oración.
Si Quieres Hablar Conmigo Habla Con Dios Y Yo Te Escucharé
Espero Estar Con Él Lo Suficiente Para Continuar Siendo útil Para Ti
Donde Quiera Que Me Encuentre.
Y Si Quieres Escribir Algo De Mí, Ojalá dijeras Sólo Una Frase
“Fue Mi Todo, Creyó En Mí Y Me Adoró”.
Ahí Entonces Derrama Una Lágrima,
Yo No Estaré Presente Para Enjugarla Pero No Hace Falta
Pues Tal Vez Alguien Lo Hará En Mi Lugar.
Y Viéndome Bien Sustituido
Iré A Atender Mi Nueva Tarea En El Cielo.
Pero De Vez En Cuando, Da Una Escapadita Hacia Dios,
Seguramente No Me Verás, Pero Yo Estaré Muy Feliz Viéndote A Ti
Mirando Hacia Él

Crees En Estas Cosas,
Entonces Reza Para Que Los Dos Vivamos Como Quien Sabe Que Va A Morir Un Día, Y Que Podamos Morir Como Quien Supo Vivir Bien
Si Muero Antes Que Tú Creo Que Nada Voy A Extrañar
Por Que Sabes Algo?
Tenerte A Ti Ya es Como Tener Un Pedacito De Cielo.

Así empezaba la carta que Edward me había escrito para mi cumpleaños número 22. La leí y releí varias veces, con lágrimas en los ojos. Era increíble lo que estas palabras habían generado en mí. Era algo que no podía entender todavía, cómo habíamos llegado a amarnos tanto, en tan poco tiempo juntos…

Él había estado toda la mañana evitándome, escondiéndose, y yo algo suponía porque aunque era el primer cumpleaños que pasábamos juntos, él amaba hacerme regalos y sorprenderme.

Me había evitado 16 veces, y no exagero…Por un instante creí que algo le ocurría, pero a los pocos segundos, él me disipó mis dudas con un gran beso.

Si algo ocurría, él se ocupó muy bien de disuadirme. Pero algo ocurría…

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Hoy, leo y releo una y otra vez su carta, buscando quién sabe qué. Una y otra vez.Ahí Entonces Derrama Una Lágrima, Yo No Estaré Presente Para Enjugarla Pero No Hace Falta, Pues Tal Vez Alguien Lo Hará En Mi Lugar.” Una y otra vez. “Y Viéndome Bien Sustituido, Iré A Atender Mi Nueva Tarea En El Cielo”. Una y otra vez. Sólo puedo preguntar por qué. ¿Por qué?














Nota: "Si muero Antes que tú" es un poema hermoso de Mariano Osorio, por lo tanto no es mío... :)